jueves, 8 de octubre de 2009

ERÓTICA DE LA CALIGRAFÍA DÉRMICA

En "The Pillow Book" de Peter Greenaway los cuerpos están escritos, dibujados, son poemas. Originalmente en japonés, no fueron traducidos en el film, basados en un libro de una cortesana japonesa llamada Sei Shonagon, que vivió en el siglo X (dinastía Heian). Son:

Primer Libro: La Agenda
Segundo Libro: El Libro del Inocente
Tercer Libro: El Libro del Idiota
Cuarto Libro: El Libro de la Impotencia
Quinto Libro: El Libro del Exhibicionista
Sexto Libro: El Libro del Amante
Séptimo Libro: El Libro de la Juventud
Octavo Libro: El Libro del Seductor
Noveno Libro: El Libro de los Secretos
Décimo Libro: El Libro del Silencio
Onceno Libro: El Libro de la Traición
Duodécimo Libro: El Libro de los Nacimientos y de los Comienzos
Trigésimo Libro: El Libro de los Muertos

Bien, de Esta cama al sexto libro.

El Libro del Amante

Este es un libro y un cuerpo
que es tan tibio al tacto.
A mi tacto.Con este libro presioné mis ojos,
mi frente, mis mejillas,
he tenido este libro abierto sobre mi vientre,
me he sentado sonriente sobre este libro
hasta que mi cuerpo sintió nupcias con sus cubiertas.
Me he sentado riendo en este libro hasta
humedecer
sus cubiertas con mi cuerpo.
He envuelto mis piernas con este libro.
Me he arrodillado en este libro hasta hacer
sangrar mis rodillas.

Este libro y yo nos hemos vuelto indivisibles.
He puesto mis pies en las últimas páginas de
este libro,
confiada de estar erguida mucho más alta en el
mundo
de lo que alguna vez estuve.
Ojalá conserve este libro para siempre.
Ojalá este libro y este cuerpo sobrevivan a mi amor.
Ojalá este cuerpo y este libro me amen como
yo amo su
longitud, su anchura, su espesor, su texto,
su piel, sus letras, su puntuación,
sus páginas silenciosas y ruidosas.
Sus delicias cosquilleantes.

Libro, cuerpo: los amo
él respira delicadamente en su primera página.
Respira más profundamente a medida que
pasan las páginas.
Cuando se asegura el ritmo de lectura,
las palabras ganan velocidad rugiente y las
páginas corren de prisa.
He corrido con estas páginas.

Hacia el final hay un suspiro y el libro se cierra
satisfecho.
El lector de buena gana comienza nuevamente.
Cuerpo y libro están abiertos.
Rostro y página.
Cuerpo y página.
Sangre y tinta.
Puntas de dedos, los bordes reforzados,
la superficie del borde de cada página es tan
suave.
Las marcas de agua son como venas
encendidas.
Las páginas son tan armoniosas en su
proporción,
que la disonancia en los contenidos es
imposible.